SAILING IN CROATIA – Natural Equilibrium

HECHOS Y CIFRAS

432 millas náuticas
799 km
34 días en Croacia
20 días navegando
20 sitios visitados
2 averías (frigorífico y agua caliente)
1 día en puerto
2 días en boya
31 días fondeando

EL PRIMER MES A BORDO

El primer mes de la ruta hemos navegado por Croacia. Abril es una época ideal para descubrir la auténtica belleza de este país. Aunque ya habíamos visitado la región antes, esta vez pudimos descubrir el encanto del país sin la influencia del turismo. La temporada baja se dejó sentir claramente en las ciudades e incluso en las islas, donde muchos restaurantes seguían cerrados. En las islas Kornati solo vimos a dos personas en la isla de Levrnaka que estaban haciendo preparativos para abrir un mesón y nos dijeron que el parque nacional estaría lleno de turistas a partir de Mayo. Tuvimos suerte de tener playas, montañas e islas para nosotros solos.

En la mayoría de los lugares que visitamos pudimos elegir las mejores bahías para fondear, lo que nos ayudó a reducir costes de amarre y disfrutar de una tranquilidad absoluta. En el pequeño pueblo de Sali atracamos en el puerto de la ciudad. Allí aprovechamos para repostar agua y limpiar el barco antes de navegar hacia las islas Kornati.

En Umag y Vela Luka (Korčula) utilizamos las boyas de la entrada del puerto.

Las etapas de navegación ocuparon aproximadamente la mitad del tiempo de la ruta. Solíamos navegar hacia el siguiente destino cada dos días. Sin embargo, después de intensas jornadas de navegación, ampliamos nuestras estancias para recuperarnos del viaje y tener más tiempo para conocer los lugares.

La convivencia y el trabajo en equipo funcionan muy bien. Conocernos mutuamente y la comunicación son la base para vivir juntos en un espacio limitado y seguir aprendiendo uno del otro. Los primeros días han sido una etapa de adaptación al nuevo ritmo de vida, significativamente diferente al que conocíamos hasta entonces. La vida cotidiana en el barco es más lenta, pero está llena de cambios constantes que consumen mucha energía y no deben subestimarse. Experimentamos cambios geográficos, culturales y meteorológicos todos los días. Además, cada viaje es un aprendizaje en el que funcionamos como equipo.

El tema de navegación ha mantenido a Noa especialmente ocupada. Cada travesía ha servido para aprender nuevas lecciones y para practicar lo aprendido. Después de cada ruta, solemos dialogar y compartir lo que resultó exitoso y lo que se podría mejorar en el futuro.

Las averías inesperadas han requerido adaptación, flexibildad y paciencia. Desde que partimos, el agua caliente a bordo no ha estado funcionando, por lo tanto, hemos tenido que calentar agua en una olla para poder ducharnos. Por suerte, no fue difícil acostumbrarse a este nuevo tipo de ducha, que además ayuda a reducir el consumo de agua. Hasta ahora seguimos investigando las posibles causas del error que impide que el agua se caliente cuando utilizamos el motor.

El frigorífico también dejó de funcionar, pero por suerte tenemos una nevera de repuesto que había estado instalada en nuestra camper. Así pudimos evitar quedarnos sin alimentos frescos a bordo. Desafortunadamente, no pudimos encontrar la pieza de repuesto que pensamos que solucionaría el problema. Todavía está en nuestra lista de compras.

A pesar de los cambios, estamos muy contentos de haber tomado la decisión de vivir a bordo y de haber dado el gran paso, aunque eso signifique tener que renunciar a muchas de las comodidades del pasado. Valoramos el tiempo que pasamos juntos y nos alegramos de las pequeñas cosas que nos traen gran felicidad. Vivimos con menos y apreciamos que en realidad necesitamos menos de lo que pensábamos.

LO MÁS DESTACADO DE CROACIA

Cada lugar de la ruta que visitamos en Croacia fue único y auténtico. Estos son algunos de los lugares más destacados y memorables para nosotros.

USTRINE (Isla Cres)

Esta pequeña bahía al suroeste de la isla de Cres nos encantó por su entorno natural y sus aguas cristalinas. La bahía donde fondeamos estaba muy resguardada del viento, por lo que pudimos disfrutar de un paseo que nos llevó a un mirador con impresionantes vistas al mar.

OLIB

Es una isla muy pequeña al noroeste de Zadar con poco menos de 140 habitantes. Éramos los únicos turistas en la ciudad y los lugareños nos miraban con curiosidad. Decidimos tomar una boya en la bahía de Sveti Nikola, que nos fascinó por sus aguas tranquilas y cristalinas.

ISLAS KORNATI

Las Islas Kornati son el archipiélago más grande de la costa del Adriático, declarado parque nacional y formado por 147 islas. Es un destino muy recomendado para los amantes del mar y la navegación. Para acceder es necesario adquirir una entrada. Dependiendo de la duración, existen diferentes opciones. Compramos un billete de tres días que incluye amarre en boyas. No se habían instalado en abril, pero como todas las islas estaban vacías y no había restaurantes abiertos, pudimos atracar en los pontones de las konobas.

Las Islas Kornati son un destino que definitivamente debes visitar en temporada baja si quieres disfrutar de absoluta paz y naturaleza.

MILNA (Isla Brač)

Es una pequeña ciudad al oeste de la isla de Brač. El puerto es encantador y está considerado el mejor protegido de la isla. A la entrada de la bahía hay un pontón gratuito y accesible para todos y con capacidad para 4-5 embarcaciones. Como era temporada baja, afortunadamente encontramos espacio para nosotros. El pueblo está lleno de casas de piedra a lo largo de la hermosa costa donde pudimos dar agradables paseos.

KORČULA

Es una isla en la costa sur dálmata del Adriático. Estábamos en las dos ciudades de Vela Luka y Korčula. Lo que más nos llamó la atención fue la cantidad de árboles y hierbas. Se dice que es la isla más boscosa de Croacia. Los árboles y bosques ocupan el 61% del área. La ciudad de Korčula es conocida como la Pequeña Dubrovnik ya que ambas ciudades tienen un estilo medieval muy similar. Las calles del casco antiguo están dispuestas en forma de espiga para permitir la circulación del aire y proteger contra los fuertes vientos.

La isla de Otok Badija, que está cerca del casco antiguo, tiene uno de los fondeaderos más bonitos frente al monasterio que hemos visitado hasta ahora durante nuestro viaje. La isla destaca por su encantador monasterio franciscano y una ruta de senderismo que recorre la isla. Además, en la isla se pueden ver muchos ciervos, que se han acostumbrado mucho a la gente.

DUBROVNIK

Fue la última ciudad que visitamos en Croacia antes de pasar a Montenegro. Debido a los altos precios de los amarres en el centro de la ciudad, decidimos fondear gratis en Zaton, un pueblo justo a la entrada de Dubrovnik. Desde allí cogimos el autobús hasta el centro de la ciudad para recorrerla en un día. Aunque es el lugar más turístico que encontramos en nuestro recorrido, merece la pena dedicar un día entero recorriendo sus calles, monumentos y castillos, conservados en perfecto estado. El centro histórico ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.